HERBERT MARCUSE - UN ENSAYO SOBRE LA LIBERACIÓN
En UN ENSAYO SOBRE LA LIBERACIÓN del filósofo francés HERBERT MARCUSE, más allá de su tiempo y su espacio, es un discurso que cabe en todo contexto en que se busque la libertad.
En él, el autor aborda el tema desde una perspectiva tan amplia que abarca ámbitos como la biología, la ética y la sensibilidad. Así, el texto logra desentrañar los procesos de opresión y liberación de una manera holística que carece de prescripción. En su primer parte, aborda los métodos de opresión ideológica que caracterizan a las sociedades contemporáneas, en las que el neocolonialismo utiliza métodos indirectos que son introyectados por los colonizados, perpetuando la opresión.
Después habla de las posibilidades que abre la tecnología al reducir la cantidad de trabajo para los humanos, y sugiere que en ello radica la posibilidad de la libertad dentro del reino de la necesidad. Sin embargo, para que esto ocurra, postula la necesidad de un cambio en la sensibilidad de los hombres. Éstos deben incorporar a sus instintos el rechazo a la injusticia, la fealdad y la crueldad. Con ello Marcurse profundiza en la naturaleza del arte y la estética como medios para alcanzar la libertad.
Finalmente, retoma la idea expuesta en la introducción de que la utopía debe ser una meta concebida como posible; así, la rescata de su viciada concepción que inhabilita el cambio profundo al concebirlo como imposible. Herbert Marcuse propone un mundo donde la solidaridad subordina a las fuerzas productivas y a los niveles de vida, en la concepción actual, más elevados.
En él, el autor aborda el tema desde una perspectiva tan amplia que abarca ámbitos como la biología, la ética y la sensibilidad. Así, el texto logra desentrañar los procesos de opresión y liberación de una manera holística que carece de prescripción. En su primer parte, aborda los métodos de opresión ideológica que caracterizan a las sociedades contemporáneas, en las que el neocolonialismo utiliza métodos indirectos que son introyectados por los colonizados, perpetuando la opresión.
Después habla de las posibilidades que abre la tecnología al reducir la cantidad de trabajo para los humanos, y sugiere que en ello radica la posibilidad de la libertad dentro del reino de la necesidad. Sin embargo, para que esto ocurra, postula la necesidad de un cambio en la sensibilidad de los hombres. Éstos deben incorporar a sus instintos el rechazo a la injusticia, la fealdad y la crueldad. Con ello Marcurse profundiza en la naturaleza del arte y la estética como medios para alcanzar la libertad.
Finalmente, retoma la idea expuesta en la introducción de que la utopía debe ser una meta concebida como posible; así, la rescata de su viciada concepción que inhabilita el cambio profundo al concebirlo como imposible. Herbert Marcuse propone un mundo donde la solidaridad subordina a las fuerzas productivas y a los niveles de vida, en la concepción actual, más elevados.
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